De acuerdo a la última encuesta realizada por Poliarquía, María Eugenia Vidal se mantiene, como a lo largo de 2016, entre los dirigentes con mayor imagen positiva del país. De hecho, la Gobernadora siempre tuvo mayor imagen positiva que Mauricio Macri, a excepción de febrero de 2016, en el que el Presidente la superó en valoración positiva por unos pocos puntos porcentuales, y de marzo del mismo año en el que ambos dirigentes tuvieron el mismo valor de imagen positiva.
Como se observa en el gráfico que acompaña este texto, el comportamiento de las imágenes positivas de ambos mandatarios se movió al mismo ritmo desde que asumieron sus cargos ejecutivos y hasta mediados del año pasado. A partir de agosto, la imagen positiva de Vidal comenzó a crecer, mientras que la del Presidente se mantenía estable.
Gráfico 1: Imagen positiva de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal
Este crecimiento de la imagen de la Gobernadora abre el análisis sobre la diferencia entre la imagen positiva de Vidal y de Macri desde el arribo al poder de ambos. En los primeros meses el Presidente fue reduciendo la distancia. No obstante en abril del año pasado la diferencia de imagen volvió a tomar envión (fue un mes crítico para el Presidente: fue imputado por el caso de las sociedades offshore, la UCA señaló que la pobreza ascendía al 32% y la oposición lanzó una ofensiva para sancionar una ley antidespidos). En los siguientes 90 días, el diferencial de imagen de ambos se acercó nuevamente para, desde agosto del año pasado, ampliarse casi ininterrumpidamente hasta hoy (más por un crecimiento de la gobernadora que un descenso del presidente, tal como se señaló en el gráfico 1).
Gráfico 2: Diferencia de imagen positiva entre Vidal y Macri
El comportamiento de las imágenes del Presidente y la Gobernadora permiten abrir el siguiente interrogante: ¿cuál es el sector que apoya a Vidal pero no al Presidente? Para intentar responder esta pregunta se combinó la imagen de ambos dirigentes para conformar cuatro cuadrantes, de acuerdo a los datos de la última encuesta de Poliarquía del mes de enero: A) Quienes tienen imagen positiva de ambos (46%), B) quienes tienen imagen regular o negativa de Macri y positiva de Vidal (17%), C) quienes tienen valoración positiva de Macri y regular o negativa de Vidal (2%) y D) quienes tienen imagen negativa de ambos (30%). El restante 5% corresponde a entrevistados que no definieron su postura.
El segmento que interesa en esta oportunidad es aquel que tiene una mirada más positiva hacia la Gobernadora que hacia el Presidente, y que está integrado por un 17% de la población, casi uno de cada cinco argentinos. Este sector se caracteriza por los siguientes aspectos:
I. Creen que el país empeoró el último año
II. No son muy optimistas respecto al futuro del país
III Señalan que la situación actual es preferentemente regular (52%)
IV Desaprueban levemente la gestión del Presidente (56%).
El dato más interesante de este segmento de la sociedad es que tiene una inclinación peronista no kirchnerista: rechazan a Cristina Kirchner (el 57% tiene imagen negativa de la ex Presidenta) y valoran a Sergio Massa: el 46% señala tener imagen positiva de él y el 19% lo menciona espontáneamente como el político que más les gusta.
Esta inclinación peronista del grupo que apoya a Vidal pero no Macri generará un dilema para la Gobernadora. Si bien, como es ampliamente reconocido, la imagen positiva no puede trasladarse directamente al voto, sí es un indicador del estado de la opinión pública y de sus preferencias. Teniendo en cuenta esto, será cuestión de analizar qué es lo que terminará pesando más en este segmento poblacional a la hora de definir su voto: el apoyo a la Gobernadora y, por lo tanto, a Cambiemos o la preferencia por Sergio Massa.
Ambos escenarios tienen sus posibilidades. Votar al candidato de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires significará apoyar a la gobernadora, considerando que seguramente tendrá una participación muy activa en la campaña. Además este sector peronista que valora a Vidal no tiene una actitud de crítica exacerbada hacia el gobierno nacional. Esto refuerza la posibilidad de voto al oficialismo.
Por otro lado, votar a Sergio Massa o al candidato que él designe también es un escenario factible, considerando la opinión que tienen de la situación actual del país, el escaso optimismo que tienen de cara al futuro y la preferencia por el ex candidato presidencial.
Sera importante además analizar si este segmento, que hoy es del 17%, se mantiene estable, crece o disminuye. Cada una de estas posibilidades abrirá nuevas oportunidades y amenazas para el gobierno nacional. En octubre veremos el desenlace de la historia, mientras tanto, cada espacio deberá tratar de fidelidad a sus votantes para evitar lamentos electorales.
