Alejandro Catterberg, director de Poliarquía Consultores, dialogó con Marcelo Longobardi en “Cada mañana” por Radio Mitre, acerca de los resultados del informe “Percepciones acerca de la coyuntura política, social y económica de la Argentina”.
A continuación se exhibe la entrevista desgrabada del 26 de noviembre de 2019:
ML: Te pediría si nos podés sintetizar el ambiente que hay en la política argentina en estos últimos días de transición entre hoy y el 10 de diciembre
AC: Para ir directo al punto, el resultado de nuestro informe está basado en la última encuesta nacional que hicimos en noviembre. Muchas veces lo hablamos, nosotros en Poliarquía hace ya más de 20 años hacemos una encuesta nacional los primeros 15 días de cada mes y esta es la última encuesta de gestión de Mauricio Macri y la primera después de la elección nacional.
De la encuesta salen varios números e indicadores que marcan lo particular del momento político que vive la Argentina. Por un lado, es un momento desde la percepción de la población de los más críticos que nosotros tenemos registro en cuanto a la situación económica. Todos los indicadores que nosotros medimos de percepción, ya sea cómo le gente evalúa la situación económica del país, a situación económica personal, si le alcanza o no la plata para llegar a fin de mes, los indicadores de consumo y propensión al consumo, toda una batería general de indicadores que está en los últimos meses y hacia el final de la gestión de Macri en los peores niveles desde la salida del 2002-2003. Desde la opinión pública se confirma el cierto fracaso de la gestión de Cambiemos en tanto y en cuanto mejorar las condiciones económicas y los indicadores económicos. Eso convive con un presidente que se va con 40 puntos de aprobación que subió en estas últimas semanas después de la derrota electoral y que coincide con el porcentaje de votos que sacó.
Entonces ahí hay un cierto dilema: ¿cómo y por qué Macri se va con el nivel de votos con el que se está yendo y con un nivel de aprobación bastante respetable, y con una cantidad de bancas en el Congreso Nacional que es la más grande desde que Cambiemos se conformó? Cambiemos nunca tuve el número de bancas que va a tener ahora desde que empezó como coalición política. Eso se debe en gran parte, por un lado a los reconocimientos que un sector de la sociedad tiene hacia algunas áreas de gestión de Macri -infraestructura, transporte, obras públicas, relaciones internacionales, mejoras en la calidad institucional-, hay una batería de acciones que algunos sectores de la sociedad le reconocen, todo supeditado a la mala situación económica. Pero la principal razón tiene que ver con el nivel rechazo que genera el peronismo, pero en particular el kirchnerismo, en un sector de la sociedad. Ese es el cuadro de situación con el que llega Fernández: un contexto económico muy adverso y un sector muy amplio de la sociedad que, incluso a partir de un contexto económico de los más adversos de los últimos 15 a 20 años, no estaba dispuesto a acompañar el regreso del peronismo.
ML: Acá estoy leyendo la tabla de los políticos más valorados en el informe, y los cinco primeros son Alberto Fernández, Mauricio Macri, Cristina Kirchner, Roberto Lavagna y María Eugenia Vidal. Independientemente del orden, es la misma gente pero en diferente orden -sacando a Alberto, que irrumpió en la escena política de manera sorpresiva a partir de mayo.
AC: Esa es una pregunta sobre cuáles son los dirigentes favoritos por la sociedad. Después tenemos las preguntas individuales de imagen, y Alberto Fernández en estos meses se ha transformado en el dirigente con mejor imagen del país con el 49%. Un dato particular que yo creo que el equipo de comunicación de Alberto Fernández debe prestarle atención es queno subió mucho después de ganar la elección. Típicamente cuando un candidato gana la elección sube de 5 a 10 puntos; esto le pasó a Macri, a Cristina Kirchner, a Sergio Massa, a Francisco de Narváez. Alberto Fernández luego de haber ganado la elección presidencial solo subió 3 puntos, y esto debería ser mirado con atención porque necesita en este tiempo que le queda hasta el 10 de diciembre y en sus primeras semanas de gobierno, aumentar aún más el grado de consenso social y de apoyo con que arranca. En general, la imagen más que los presidentes tienen durante su mandato es al principio, el primer mes. A partir de ahí se trata de administrar la caída.
Hoy por hoy, Fernández con 49% es un valor inferior a los 70% que tenía Cristina o Néstor Kirchner, o a los 65% que tenía Mauricio Macri. Tiene tiempo, tiene la asunción del 10 de diciembre, los discursos que va a dar, sus primeros paquetes de medidas, pero aún está varios puntos por debajo de la imagen con la que arrancaron los anteriores presidentes en Argentina.
ML: Estaba viendo también la tabla de los principales problemas que la opinión pública reconoce como más relevantes y obviamente todos los primeros son económicos. La inflación, principalmente.
AC: Cuando nosotros le preguntamos a la gente cuál es el problema que a usted en términos personales y familiares más lo afecta, los temas económicos están en un récord histórico en nuestras series en Poliarquía del 73%. Hoy casi unánimemente, cuando preguntamos qué lo está afectando a usted -no al país, no a la Argentina, sino a usted y a su familia-, la gente habla de la economía. Y eso a su vez le da una restricción más de todas las que tiene Fernández para moverse hacia adelante. Estamos ante una sociedad muy preocupada y cansada, y que no estará proclive a aceptar medidas que impliquen mayor esfuerzos y ajustes.
Alberto Fernández va a asumir con tres conjuntos de restricciones muy importantes. Unas son impuestas por la realidad económica argentina (la deuda, la alta inflación, el bajo nivel de actividad, las altas tasas de interés) que van a ser fuertísimas. También tenemos todas las restricciones de la política nacional con las cuales Alberto Fernández va a tener que convivir, empezando por su relación con Cristina Kirchner, con el resto del Peronismo, con los gobernadores, con las limitaciones para generar mayorías en el Congreso, y con el estado de la opinión pública y la sociedad. El tercer grupo de restricciones tiene que ver con la política internacional, sobre todo la relación con el FMI, con Brasil, con EEUU y con el contexto que hay en Latinoamérica.
La pregunta es si Alberto Fernández a la hora de diseñar las políticas económicas que va a poner en marcha a partir del 10 de diciembre, va a pensar algún conjunto de medidas que satisfaga a todas las restricciones, o si está frente a un conjunto vacío. Esas son las dudas que el equipo de Fernández va a tener que responder a partir del 6 de diciembre con su gabinete y a partir del 10 de diciembre cuando asuma.
ML: Es muy clara esta definición: Fernández tiene un cuadro económico bien complicado y dos grandes restricciones, la local y la internacional. Es tan simple como eso.
AC: Es un juego de frazadas cortas: si se mueve para un lado, se generan conflictos con el otro y eso hay que ver cómo se soluciona.
ML: Estaba mirando en la tabla de problemas, hay tres que están identificados con doble dígito: los problemas económicos, la inflación y el desempleo. Todo el resto existe en un nivel mucho más bajo.
AC: Cuando la gente piensa en su círculo más cerrado, la economía le viene mucho más a la cabeza que cuando por ahí piensa a nivel nacional. Aún así, tanto cuando preguntamos por problema nacional como por problema personal, las variables económicas están en un récord histórico.
Para acceder al audio haga click aquí
